Como cada año, el tradicional Festival de Barriletes Gigantes de Sumpango tuvo lugar este 1 de noviembre y fue punto de encuentro para guatemaltecos de distintas partes del país que acudieron para disfrutar de la que es considerada una de las actividades más emblemáticas de nuestra cultura.
La edición 125 del festival estuvo cargada de explosivos colores, los cuales daban vida a los gigantescos barriletes, elaborados por artesanos de la localidad y utilizando nada más que un tipo especial de papel y bambú.
Los barriletes más grandes observados en el festival alcanzaban medidas entre los 10 y 20 metros, los diseños tenían motivos distintos pero todos coincidían en una amplia variedad de colores y dinamismo.
El presidente de Guatemala, Bernardo Arévalo, estuvo presente en el festival, acompañado de la ministra de Cultura y Deportes Liwy Grazioso Sierra.
“Esto es algo único. Es una tradición que estamos pidiéndole a la Unesco (Organización de Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura) que la declare patrimonio de la humanidad”, dijo el presidente en declaraciones a la prensa.
Uno de los momentos más especiales del festival fue cuando se realizó la elevación de los barriletes, una acción que de llevó a cabo en conjunto por los barrileteros, dada las grandes proporciones de las piezas, las cuales están cargadas de significado en el Día de Todos los Santos.
“Es un significado muy especial este festival para nosotros, porque tenemos esa conexión entre vivos y muertos”, explicó a la agencia EFE uno de los participantes del festival, David Puac.
Además de los barriletes gigantes, en el evento también se pudo disfrutar de una amplia variedad de gastronomía típica guatemalteca, música tradicional y folclore.