La ciudad de Los Ángeles, en el sur del estado de California, lucha contra reloj contra una serie de incendios voraces que consumen todo a su paso desde inicios de esta semana. Vecindarios completos han quedado reducidos a cenizas y escombros debido a las llamas avivadas por los vientos de más de 160 kilómetros por hora que se han presentado.
Pacific Palisades, ubicado al suroeste de Los Ángeles, entre la costa del Pacífico y la montaña, fue el punto donde todo comenzó. Las autoridades emitieron una orden de evacuación que abarcaba a unos 30.000 habitantes y aunque no existe una cifra oficial de infraestructuras dañadas, más de 13.000 edificaciones corrían riesgo ante la proximidad de las llamas.
En las últimas horas, una serie de incendios sin control amenazan otros puntos de la ciudad. El incendio Eaton afecta a dos localidades de Pasadena y Altadena. El incendio Hurst afecta la zona de Sylmar y el el incendio Sunset, desatado en las colinas de Hollywood, amenaza el corazón de la ciudad.
De acuerdo con estimaciones preliminares, los daños y pérdidas ya podrían superar los 57.000 millones de dólares, cifra que se vería incrementada debido al avance de las llamas.