Durante una ceremonia celebrada en Olimpia, en la península del Peloponeso, Grecia, tuvo lugar este martes el encendido de la Llama Olímpica, un momento simbólico que forma parte de la tradición de los Juegos Olímpicos desde 1936 y que se remonta a las tradiciones de la Grecia Antigua.
En los Juegos Olímpicos de la Antigüedad, una llama ardía de manera permanente en el altar del santuario de la diosa Hestia, y se encendían otros fuegos en los templos de Zeus y Hera.
En la ceremonia de encendido de la llama olímpica, la actriz griega, Mary Mina, interpretó a la Gran Sacerdotisa de Olimpia y encendió la antorcha frente al Prytaneum, con una coreografía de casi 30 sacerdotisas bajo la dirección de Artemis Ignatiu.
De acuerdo con el portal Olympics, tras el encendido, llama olímpica se sitúa en una urna y se lleva al antiguo estadio entregará al primer portador de la antorcha junto a una rama de olivo. Posteriormente, el portador de la antorcha lleva la llama al Bosque de Coubertin en la sede de la Academia Olímpica Internacional. Allí se usa para prender el altar donde se conserva el corazón de Pierre de Coubertin, fundador del movimiento olímpico moderno.
Luego, entrega la antorcha al segundo portador, que representa al país anfitrión de los Juegos Olímpicos, que para la edición de 2024, es Francia.
La llama olímpica recorrerá Grecia durante un viaje de 11 días en el que será portada por más de 550 relevistas. Llegará a Atenas el 26 de abril y se entregará en una ceremonia al al Comité Organizador de París 2024 en el Estadio Panatenaico. Después de la ceremonia, la llama olímpica pasará la noche en la Embajada Francesa en la capital griega.
Finalmente, se embarcará rumbo a Francia el 27 de abril, y arribará a la ciudad de Marsella, en la costa mediterránea francesa, el 8 de mayo.