Con la llegada abrupta de la temporada fría, es importante mantener rutinas que no dañen la piel, además, cada parte del cuerpo necesita cuidados específicos.
El aire seco, las bajas temperaturas y los cambios entre el interior y el exterior, pueden provocar sequedad, tirantez, irritación e incluso agrietamiento.
Adoptar una rutina de cuidado específica es fundamental para mantener la piel sana e hidratada, es por eso que te dejamos algunos consejos según las necesidades de cada parte del cuerpo.
- Hidrata por dentro y por fuera: toma suficiente agua, la creencia es que solo en temporada de sol y calor es necesario mantener hidratado el cuerpo, la realidad es que siempre debes beber agua. Además, complementa con crema para el cuerpo y rostro.
- Un producto para cada necesidad: busca productos con ingredientes como ceramidas, urea, lanolina o manteca de karité, que ayudan a reforzar la barrera cutánea. Pero usa una especial para manos, cuerpo y rostro, procura llevar una en tu bolsa o mochila para mantener hidratación completa. Además no olvides los labios, pies y el cuero cabelludo.
- Aplica protector solar (idealmente con un FPS de 30 o superior) en el rostro y cualquier área expuesta.
- No uses agua muy caliente ya que esta elimina los aceites naturales de la piel, provocando mayor sequedad. Opta por agua tibia. Utiliza jabones y limpiadores suaves, sin perfumes ni químicos agresivos, especialmente para el rostro y las manos.
- Utiliza bufandas, gorros y guantes para cubrir el rostro, las orejas, el cuello y las manos.
- Tejidos Naturales: Prioriza la ropa interior y las capas en contacto con la piel de tejidos naturales como el algodón para permitir la transpiración y evitar irritaciones.
- Humidificadores: Si el aire interior es muy seco debido a la calefacción, considera usar un humidificador para reponer los niveles óptimos de humedad en el ambiente.
¿Qué otros cuidados conoces?


