El cantante guatemalteco Ricardo Arjona ha decidido volver a la tierra que lo vio nacer en busca de inspiración.

Para el famoso cantante guatemalteco, Ricardo Arjona, parece no haber sitio en el mundo en donde pueda encontrar mayor inspiración que en Guatemala. Y eso que ha visitado prácticamente todo el planeta.

Y es que la tierra que lo vio nacer se está convirtiendo en el nueva conexión del artista con sus “musas” para crear su nueva producción, mientras se toma unos días de descanso en su tour mundial, “Blanco y Negro”.

Ricardo Arjona ha mostrado en Instagram estampas de su visita a Guatemala

La pausa de Arjona en Guatemala

El Tour Mundial “Blanco y Negro” ha posicionado a Ricardo Arjona en los mejores escenarios del mundo. Su éxito ha sido tan grande que la revista Rolling Stone lo ha comparado con bandas como Coldplay y ha dicho que su gira lo consagró en Estados Unidos.

Pero, como todo artista, Arjona necesita, de vez en cuando, hacer una pausa. Y nada mejor que el lugar donde creció y descubrió su pasión por la música para “reencontrarse” con el compositor que ha encantado a millones de personas.

En su cuenta de Instagram, Arjona ha revelado que se encuentra en Guatemala, en donde busca inspiración para componer nuevas canciones.

La anécdota de “Señora de las Cuatro Décadas” y “Marta”

A propósito de su visita a Guatemala, Arjona ha recordado una anécdota particular de sus primeros años como artista. “En casa nunca tuvimos piano. De niño solía pintar en tablas de madera las teclas…”, comenta.

Más tarde, asegura, ya en México, logró escribir, junto a un teclado que pudo comprar, sus primeras canciones compuestas a piano: “Señora de las Cuatro Décadas” y “Marta”.

“Creo que desde que escribí Marta nunca volví a tocarla en piano (y se nota)”, bromea el compositor. Los recuerdos le han llegado en Guatemala, adonde ha llegado en busca de inspiración.

“En este rincón de Guatemala, donde se me ve perseguir desesperado a las musas abandonadas, para ver si logro enamorar alguna para que me regale el beso que me reencuentre con la maravilla de ver nacer historias nuevas”, escribe Ricardo Arjona.