Arqueólogos checos y eslovacos han anunciado un gran descubrimiento. Una expedición a la selva guatemalteca, que tuvo lugar el verano pasado, descubrió los restos de una ciudad maya, que tiene casi tres mil años de antigüedad y la cual podría arrojar más luz sobre el ascenso y la caída de una de las civilizaciones más antiguas del mundo.
El descubrimiento se dio en la selva de Petén, que en muchos sentidos fue el centro de la civilización maya en el período preclásico.
Llamada “Yax Balam”, que significa “Primer Jaguar”, es el más antiguo de la región y, al mismo tiempo, el asentamiento más grande aún por descubrir en la región nororiental de Petén. Su descubrimiento permitirá a los investigadores explorar fases cruciales de la historia maya.
“La ciudad es una de las primeras ciudades-estado mayas, como lo indica ‘Yax’, que significa el comienzo. En la cultura maya, el jaguar simboliza el poder, está vinculado al inframundo y juega un papel fundamental en su mitología”, dijo el profesor Milan Kováč al medio Prague Morning.
Actualmente, los expertos, entre ellos los de la Universidad Técnica Checa, están analizando los resultados. Su objetivo es recrear modelos 3D de la ciudad y presentarlos visualmente al público.
“Nuestro objetivo es acercar al público la vida de una de las civilizaciones más antiguas del mundo a través de la animación 3D”, dijo otro de los investigadores.
El descubrimiento fue posible gracias a la utilización de tecnologías avanzadas, entre ellas: inteligencia artificial, redes neuronales y LiDAR (una tecnología láser), que permitieron mapear la ciudad y localizar estructuras y artefactos importantes.