La policía nicaragüense anunció el viernes pasado que quiere arrestar a Karen Celebertti, la directora del concurso de belleza de Miss Nicaragua, por supuestamente arreglar la competencia para favorecer a las reinas de belleza anti-Ortega. El anuncio del gobierno se produjo menos de dos semanas después de que la reina de belleza nicaragüense Sheynnis Palacios ganara el concurso Miss Universo, colocando al país en los ojos del mundo. Era la primera vez que un nicaragüense ganaba la competición.
El gobierno nicaragüense, dirigido por Daniel Ortega, de 78 años, se ha convertido lentamente en uno de los regímenes del mundo. Curiosamente, Ortega ayudó a poner fin a una dictadura de cuatro décadas, antes de finalmente convertir a Nicaragua en su propio estado autoritario. Su continua represión de los disidentes, incluidos todos, desde activistas hasta miembros de la iglesia, ha dado lugar a protestas en el país durante años.
El triunfo de Sheynnis Palacios el mes pasado suponía un alivio para los años de mala prensa hacia Nicaragua, puesto que internacionalmente el país finalmente resonaba por un triunfo positivo. Sin embargo, el gobierno se preocupó cuando las fotos de Palacios participando en las protestas de 2018 circularon en redes sociales. En la competencia Palacios también llevaba una capa azul y blanca, que muchos creían que era una referencia a la bandera nacional que se prohibió en 2018. Ortega utiliza ahora una pancarta sandinista roja y negra como su símbolo nacional preferido.
La vicepresidenta y primera dama de Nicaragua, Rosario Murillo, criticó también días después cómo los partidarios de la oposición estaban aprovechando la victoria de Sheynnis.
Respecto a la directora del Miss Nicaragua, la policía nacional le acusa en un comunicado, alegando que Celebertti también estuvo involucrada en las protestas de 2018, a las que llamaron “las acciones terroristas de un golpe fallido”.
De acuerdo con reportes, Celebertti aún no ha sido arrestada, y se cree que se encuentra fuera de Nicaragua.